
Ángel obedece y, consciente de lo que provoca en él, se deja la piel en cada una de las poses. Llevan casi una semana trabajando juntos para una nueva campaña de moda y cada día va perdiendo más ropa. En la pasarela la heterosexualidad es muy relativa. Qué sabe nadie.
Tras terminar la sesión con éxito, la mirada del modelo recorre los labios del fotógrafo y se propone compensarle los siete días de trabajo. No duda de su orientación sexual, sólo quiere jugar un rato. Mientras tú lees este texto, en la habitación oscura de una galería arden sus cuerpos.
David Waldorf.